El Señor dijo a Santa Faustina:
“Debes mostrar misericordia al prójimo siempre y en todas partes. No puedes dejar de hacerlo ni excusarte ni justificarte.
Te doy tres formas de ejercer misericordia al prójimo:
La primera – la acción.
La segunda – la palabra.
La tercera – la oración.
En estas tres formas está contenida la plenitud de la misericordia y es el testimonio irrefutable del amor hacia Mí” (Diario, 742)